El salón es uno de los espacios más acogedores de la casa, la estancia que acoge nuestras pasiones, la relajación y la convivencia. Por lo tanto, amueblarlo significa expresar algo sobre nosotros mismos, nuestras pasiones y nuestros gustos en muebles.
Respetar el estilo de la casa es esencial a la hora de amueblar el salón, pero con un poco de cuidado, puedes crear un espacio elegante, funcional y acogedor. En esta guía, te presentamos una breve lista de elementos esenciales para amueblar el salón y lograr que sea perfecto. Una colección de muebles y accesorios que creemos que nunca deben faltar al amueblar tu salón, independientemente del estilo.
¡El sofá, la estrella de tu salón!
El sofá es símbolo de relajación y convivencia, y por eso se convierte en la estrella de la decoración del salón.
Al elegir un sofá para tu salón, considera cuidadosamente los colores y, sobre todo, el tamaño. Un sofá en forma de L o especialmente grande es perfecto para amueblar un salón muy grande, pero corre el riesgo de saturar el espacio en una habitación más pequeña. Si no tienes un salón grande, es mejor optar por sillones o asientos alternativos (pero igual de cómodos) para ti y tus invitados.
Suavidad y funcionalidad: decorando el salón con alfombras
Las alfombras son accesorios decorativos esenciales para amueblar el salón; aportan suavidad y color al espacio y son un detalle visual. Pero eso no es todo: con una alfombra, también puedes dividir los espacios del salón de forma ideal y crear una zona de estar aún más ordenada.
Colocada delante del sofá, la alfombra creará una "zona de relax" dentro del salón, visualmente separada del resto de la estancia. ¡Un toque de estilo y un salón aún más ordenado!
Librerías para el salón para organizar tus lecturas favoritas (¡y más!)
¿Qué hay mejor que leer un buen libro sentado en tu sillón favorito en las noches de invierno? A la hora de decorar el salón, ¡es realmente difícil prescindir de una bonita estantería! Decora la estancia con su sola presencia y, además, te permite exhibir tus libros favoritos de forma destacada, un detalle que dirá mucho de ti y de tus gustos a quienes te visiten por primera vez.
Las estanterías también pueden albergar revistas, pequeños recuerdos o una colección de discos. Son esenciales para decorar el salón con estilo y un excelente punto de partida para crear tu propio rincón de lectura en casa, ¡un oasis de paz y tranquilidad para relajarte de verdad!
Toda la elegancia decorativa de las mesas de centro para decorar el salón
Las mesas de centro ayudan a hacer el salón aún más acogedor, aportando ese toque esencial de funcionalidad y (igual de importante) ¡siendo elementos decorativos por sí mismas!
Una mesa de centro delante del sofá es un clásico del diseño de interiores para amueblar el salón, pero nada impide añadir mesas auxiliares para complementar el propio sofá, un sillón o incluso una pequeña consola decorativa. De esta manera, puedes completar la decoración del salón con un toque personal y, además, tener superficies adicionales para decorar a tu gusto.
Elegancia acogedora: todo el encanto de una chimenea (o una chimenea artificial) en el salón
¡La chimenea es mucho más que un mueble! Calienta la estancia (¡en todos los sentidos!) y es el punto focal del salón, capaz de atraer la atención de los invitados. Pero eso no es todo: la chimenea se puede realzar de muchas maneras diferentes según tus gustos, ¡añadiendo estilo y carácter a todo el salón!
Si no tienes la suerte de tener una chimenea, echa un vistazo a los marcos para chimeneas en nuestra tienda: chimeneas artificiales que recrean la magia de las chimeneas reales, listas para decorar como quieras y amueblar tu salón con un accesorio que marca la diferencia.
¡El verde es precioso! Decora el salón con plantas.
¡Por fin, el inevitable toque de verde! Las plantas son vida, color, frescura... ¡Una auténtica panacea para decorar el salón y hacerlo aún más vibrante! Las plantas de interior "limpian" el aire e iluminan la habitación. Puedes colocarlas en la mesa de centro, en el suelo, en el alféizar de la ventana o incluso en una estantería, alternándolas con libros y revistas. Como por arte de magia, toda la sala se transformará en un espacio acogedor, perfecto para relajarse.
